Terapias naturales y energéticas
Medicina Tradicional China
La Medicina Tradicional China contempla tres dimensiones en la persona: el cuerpo físico, la energía y la mente. De la misma manera que poseemos un sistema circulatorio por donde corre la sangre y un sistema linfático por donde circula la linfa, nuestro cuerpo tiene una red de canales energéticos, los meridianos, que activan los diferentes órganos y se conectan entre sí.
La energía vital es el sostén de la vida y de la salud. Cuando sufrimos alguna disfunción o enfermedad cuya causa fisiológica no se detecta por los diagnósticos convencionales, casi siempre es debido a un desequilibrio energético: un deficiente flujo de energía (defecto) o una congestión (exceso). La Medicina China ofrece varias terapias para resolver estos problemas y restaurar el correcto flujo de energía. Entre ellas, la acupuntura, la digitopuntura, la moxibustión. Estas prácticas activan ciertos puntos clave de los meridianos energéticos para desatascar o estimular la energía estancada.
La acupuntura y la moxibustión han demostrado ser muy eficaces para tratar dolencias y trastornos como la migraña, la hipertensión, la ansiedad, la inflamación y todo tipo de dolores. Ayudan a activar los órganos sobrecargados o debilitados, mejorando las funciones de digestión, respiración, circulación y el funcionamiento del sistema reproductor. También es útil para ayudar en estados emocionales alterados, cansancio, decaimiento anímico y estrés.
Además de estas terapias, la Medicina China utiliza remedios basados en hierbas, ejercicios energizantes y recomendaciones dietéticas y nutricionales. Tras una entrevista completa y un diagnóstico, el terapeuta determinará con el paciente la mejor terapia a seguir. A su criterio se alternarán diversas terapias, cuyo efecto sumado añadirá eficacia al tratamiento.